EL
PROBLEMA DEL SER HUMANO Y EL PROBLEMA DE LA SOCIEDAD/POLÍTICA EN MARX
1)
EL
PROBLEMA DEL SER HUMANO EN MARX:
La
filosofía de Marx es un humanismo materialista. Frente al idealismo de
Hegel, Marx sostiene que el hombre no es principalmente espíritu ni conciencia,
sino un ser material y sensible; y, por otra parte, aunque toma de Hegel la
concepción dialéctica de la historia, para Marx el motor de la historia no es
la contradicción entre diferentes sistemas de ideas, sino las contradicciones
económicas y la lucha de las clases sociales, enfrentadas entre sí. Si para
Hegel la filosofía es, sobre todo, simple teoría, para Marx, como afirma en su
famosa Tesis XI sobre Feuerbach, la filosofía no tiene la misión de
explicar la realidad, sino que debe transformarla.
Asimismo, frente al materialismo de Feuerbach, Marx va a mantener que lo
que hace desgraciado al hombre no es la alienación religiosa, sino que el
hombre busca refugio en las ficciones de la religión porque experimenta una
alienación real, mucho más profunda e importante: la alienación económica,
causada por las condiciones que impone el actual modo de producción
capitalista. Es esa alienación económica la que hay que criticar y suprimir, si
se quiere que el hombre recupere su dignidad perdida.
En sus
Manuscritos económico-filosóficos
(1844), Marx sostiene que no existe una “esencia humana” en general, sino que
el hombre es un ser activo, que se hace a sí mismo, mediante su actividad
práctica (praxis), es decir, por su trabajo,
el cual le pone en contacto con otros seres humanos, con los que forma la
sociedad y transforma la naturaleza. De manera que la esencia humana no es otra
cosa que el conjunto de relaciones sociales que entablan los hombres
entre sí, a lo largo de la historia.
El
trabajo es, pues, la manifestación por excelencia del hombre, porque gracias al
trabajo el hombre crea sus condiciones de vida y se crea a sí mismo. Pero en el
modo de producción capitalista, el trabajo se ejecuta en unas condiciones que
no realizan plenamente al hombre, sino que lo alienan, es decir, lo llevan a
perderse en un mundo de mercancías, que termina por oprimirlo. Es esa
alienación económica la que trata de enmascarar la ideología política,
jurídica o religiosa creada por la sociedad burguesa, para justificar una
situación económicamente injusta, e injustificable.
La
alienación que experimenta el ser humano en el modo de producción capitalista
es, según Marx, cuádruple, y afecta tanto a los trabajadores como a los
capitalistas:
1)
El
trabajador está alienado respecto del producto de su trabajo, que,
transformado en capital, se convierte en un poder extraño e
independiente de él, que termina por dominarlo. En virtud de esta primera forma
de alienación el trabajador experimenta la DESPOSESIÓN del producto que ha
creado.
2)
El
trabajador, además, está alienado respecto de su propia actividad laboral,
porque su trabajo tampoco le pertenece, pertenece al capital, quien termina
convirtiéndolo en una pieza más de la cadena de producción. Por esta segunda
forma de alienación, el trabajador sufre una completa DESPERSONALIZACIÓN.
3)
En
el modo de producción capitalista, el ser humano está alienado respecto de
la naturaleza, porque este modo de producción solo ve en ella una fuente de
recursos a explotar. Por esta tercera forma de alienación, el ser humano sufre
una DESNATURALIZACIÓN.
4)
Finalmente,
en el modo de producción capitalista todos los seres humanos se encuentran alienados
entre sí, porque en el trabajo alienado se corta toda relación
verdaderamente humana: cada uno trabaja para sí mismo, y no ve a los otros más
que como competidores o explotadores. Esta alienación se traduce en una
completa DESHUMANIZACIÓN.
Para
Marx la supresión de la alienación económica sólo puede producirse si tiene
lugar una emancipación de los trabajadores mediante una revolución
social.
El
proceso revolucionario requiere que el proletariado adquiera primero conciencia
de clase, es decir, cobre conciencia de su injusta situación, y pase a
entablar una lucha de clases que termine por derrocar el sistema
económico que la ha creado. La acción revolucionaria ha de dirigirse,
principalmente, a suprimir la propiedad privada de los medios de producción
(tierra, industria, fábricas…), que han de pasar a manos de sus legítimos
dueños: campesinos y trabajadores, e instaurar una sociedad comunista,
donde las relaciones entre mercancías (dinero) sean sustituidas por verdaderas
relaciones humanas: sólo entonces empezará la auténtica historia de la
Humanidad.
2)
EL
PROBLEMA DE LA SOCIEDAD/POLÍTICA EN MARX:
La concepción
de la sociedad y de la política de Marx recibe el nombre de materialismo
histórico y se encuentra expuesta en el libro La ideología alemana (1845-1846),
que Marx escribió en colaboración con su amigo Engels.
Se
trata de una teoría según la cual la fuerza propulsora de los cambios
históricos no proviene de las ideas (como creía Hegel), sino de las
transformaciones que experimenta la economía, transformaciones que luego
provocan cambios ideológicos en la sociedad.
Marx
distingue en toda sociedad dos aspectos: la INFRAESTRUCTURA ECONÓMICA y la SUPERESTRUCTURA IDEOLÓGICA.
a)
Dentro
de la INFRAESTRUCTURA ECONÓMICA ―que es la base real de la sociedad― se distinguen las fuerzas productivas y las relaciones
de producción. Las fuerzas
productivas incluyen la fuerza del trabajo y los medios de producción
(tierra, máquinas, tecnologías, materias primas…), mientras que las relaciones
de producción son las relaciones que establecen los hombres entre sí en el
proceso productivo (división del trabajo, régimen de propiedad, sistemas de
distribución y cambio).
La unidad
constituida por las fuerzas productivas y las relaciones de producción es
denominada por Marx MODO DE PRODUCCIÓN (Marx señala que a lo largo de la
historia se han sucedido cuatro modos de producción: oriental, esclavista,
feudal y burgués-capitalista).
Las
relaciones de producción generan una división de la sociedad en diferentes clases
sociales, unas económicamente dominantes, y otras dominadas.
b)
La
infraestructura económica condiciona la SUPERESTRUCTURA
IDEOLÓGICA de la sociedad, es decir, las formas de conciencia o ideología
de esa sociedad. La ideología vigente en una sociedad histórica no es sino el
conjunto de representaciones mentales políticas, jurídicas, morales,
religiosas, artísticas, científicas, filosóficas, en las que se refleja en la
mente de los hombres de esa época el modo de producción económica vigente en la
sociedad a la que pertenecen.
La
ideología vigente en una determinada época es la impuesta por la clase
dominante en ese momento histórico, de manera que dicha ideología tiende a
justificar la estructura económica existente. Como dice Marx: “el poder material dominante en la sociedad es, al
mismo tiempo, su poder espiritual
dominante”.
c)
Pero
las fuerzas productivas están en constante cambio y desarrollo, mientras que
las relaciones de producción permanecen invariables, de manera que, a la larga,
terminan por obstaculizar el desarrollo de tales fuerzas.
Se
produce entonces una contradicción interna (dialéctica) en el modo de
producción que, si se acentúa, produce inevitablemente una revolución
social, la cual deja paso a un nuevo modo de producción, entrándose así en
una nueva etapa de la historia. (P. ej.: la Revolución Francesa, o la
Revolución bolchevique)
d)
El
cambio en la infraestructura económica altera lógicamente el conjunto de la
superestructura ideológica. Al cambiar las condiciones de vida de los hombres,
se modifican sus ideas, sus concepciones y su propia conciencia, y la nueva
clase dominante impone su propia ideología; así pues, en la teoría social de
Marx los cambios ideológicos se derivan de los cambios en la producción
material.
e)
Marx
considera que, con la futura revolución comunista y la victoria del
proletariado sobre la burguesía capitalista, éste impondrá su propia ideología,
que responde, no a los intereses particulares de una clase concreta ―como ha venido sucediendo hasta ahora a lo largo de la
historia―, sino a los intereses de toda la
Humanidad (puesto que el proletariado constituye la inmensa mayoría de la
población mundial).
El materialismo histórico es, pues, una
filosofía de la historia en la que los cambios históricos están producidos
principalmente por el desarrollo de las fuerzas productivas, especialmente el
trabajo humano. Esto significa que, para Marx, el hombre es el actor
principal de la historia, si bien ésta sólo puede avanzar al precio de
contradicciones y luchas entre las clases sociales, enfrentadas económica e
ideológicamente entre sí.También os ofrezco estos dos pequeños vídeos que he hecho, en relación con los dos problemas más importantes en Marx: el problema del ser humano:
Y el problema de la sociedad/política:
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